Categorías
Columnas y artículos

Cerebro Lector

proust
Portada del libro, en su versión original en inglés

En el libro “Proust y el calamar: una historia sobre la ciencia y el cerebro lector” (cuya edición en español se tradujo con el título «Cómo aprendemos a leer«) la escritora norteamericana Maryanne Wolf recuerda un episodio en la historia de la lectura, a veces pasado por alto: Sócrates y su oposición a la expansión de la palabra escrita.

La autora explica que el filósofo advirtió los peligros de la escritura, argumentando que  relegaba la capacidad oratoria y la memoria como principal herramienta intelectual, y que además propiciaba la pérdida del control sobre el lenguaje. Las cosas cambiaban y Sócrates veía en eso una amenaza. Este hecho histórico le permite a la autora del libro (quien además de ser doctora en neurociencia es psicolinguista) lograr que en su relato confluya la historia y la ciencia para explicar el desarrollo de la lectura.

A diferencia del habla o la visión, la lectura no tiene un programa genético que se traspase a través de las generaciones. El desarrollo del cerebro lector no fue continuo en el tiempo ni en su aparición geográfica. Transcurrieron dos mil años desde el primer sistema de escritura hasta el alfabeto griego del que Sócrates sospechaba. Aprender a leer sólo es posible por la plasticidad del diseño cerebral, y cuando se logra, el cerebro del individuo cambia para siempre”, sostiene Maryanne Wolf. La flexibilidad del cerebro permite coordinar aspectos visuales, auditivos, semánticos, sintácticos y espaciales que de otro modo no entrarían en relación.

brain3

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

Las zonas cerebrales que se activan varían según las exigencias del sistema de lectura. Este hecho es un descubrimiento relativamente reciente. “Antes de la década de los´70, las teorías sobre lectura eran muy débiles, se suponía que el cerebro guardaba una especie de fotocopia de lo que leía en la cabeza”, explica Ricardo Martínez, lingüista, magíster en estudios cognitivos y académico de la Universidad Diego Portales.

Los jeroglíficos egipcios debían ser leídos de derecha a izquierda y luego de izquierda a derecha y de abajo hacia arriba o viceversa según la arquitectura del recinto. Esto exigía un espectro de habilidades distinto de sistemas más abstractos como el basado en el alfabeto que relaciona signos con sonidos. El chino -basado en ideogramas- involucra patrones neuronales diferentes del inglés y el castellano. Actualmente es posible rastrear esas diferencias a través de la tecnología de neuroimagen -que hace visible el funcionamiento del cerebro- desarrollada a partir de los años ’90.

El calamar y las redes neuronales

Maryanne Wolf tituló su libro “Proust y el calamar” como un contrapunto entre la experiencia literaria y los intentos de la ciencia para comprender el funcionamiento de la lectura.

neuronaEn su ensayo “Sobre la lectura”, Proust evoca los libros como un refugio, la posibilidad de un estado mental complejo: leer no sólo exige descifrar información, también despierta recuerdos, visiones, sensaciones, y en el mejor de los casos un “placer divino”, según el autor francés. Wolf escogió a los calamares para el título de su libro, porque este tipo de moluscos sirvió como conejillo de indias en la década de los ’50, durante las primeras investigaciones sobre transmisiones de neuronas. En un extremo la lectura es una actividad que involucra la vida misma del ser humano, por el otro (en el caso del calamar) se trata sólo de células que transmiten información.

“Uno puede entender las aprensiones de Sócrates a una transición entre la cultura oral y la literaria reflejadas en nuestras propias preocupaciones en la inmersión de nuestros niños en el mundo digital”, apunta Wolf. Las nuevas tecnologías están cambiando los hábitos de lectura, y Google es para muchos el símbolo de lo que fue el alfabeto para el filósofo. De hecho, hace algunos años años la revista Atlantic Monthly provocó una polémica cuando en su portada preguntaba “¿Está Google volviéndonos tontos?”. El artículo proponía que navegar en internet podría ser una amenaza para las capacidades de lectura profunda y para la capacidad de concentración.

Pantallas encendidas

Actualmente la lectura en pantalla es un formato cotidiano: correos electrónicos, redes sociales (Facebook, Twitter), blogs, medios onlinee incluso un simple mensaje por WhatsApp. Este hecho provoca una paradoja: en tanto el sentido común indica que cada vez se lee menos, los datos constatan que gran parte de nuestra comunicación actual se basa en la escritura. “La lectura como proceso está probablemente en el momento más activo de la historia”, sostiene Ricardo Martínez. El punto es que cuando se piensa en lectura no se piensa en pantallas, sino en papel, “se asume que la lectura es de libros, diarios y revistas. Por alguna razón consideramos que los medios impresos son el fundamental sistema de difusión de la información y son más serios y nos parece que los medios electrónicos no tienen esa seriedad”, apunta el lingüista.

celular
Cada vez leemos más desde nuestros smatrphones

En 1894, el escritor Octave Uzanne escribía “El fin de los libros”, advirtiendo que la invención de Gutenberg sucumbiría a la invención del fonógrafo. “Es fácil hacer ciencia ficción sobre los efectos que tendrán los cambios tecnológicos en la lectura en el actual escenario”, comenta Ricardo Martínez aludiendo a la fascinación que suelen ejercer las nuevas tecnologías entre los entusiastas del minuto.

Pero hay cosas que no son ciencia ficción, y una de ellas es el hecho que leer de una pantalla provoca patrones distintos de lectura. La interacción con un texto electrónico hace más relevante la tarea de localizar información por sobre las tareas de interpretar y evaluar. “La lectura es diagonal, de revisión y general, que permite hacernos una idea general”. Una suerte de lectura algunas veces caracterizada como “promiscua”, que depende de las decisiones del lector, respecto a seleccionar determinados vínculos o links, mover la barra de la pantalla o acceder a alguna ventana audiovisual. En una columna titulada «Leer sin papel”, publicada por el diario El País, el escritor José Antonio Millán comentaba la gran cantidad de reflexiones y estudios que se están haciendo sobre el avance de la lectura digital. “Y de ellos podemos concluir que leer en papel es una operación muy diferente de la lectura en pantalla: mucho más de lo que podría parecer».

Mundo post-tipográfico

Un estudio de comprensión lectora realizado por la Universidad Católica de Valparaíso (el cual se reseña en el libro «Saber leer») un grupo de alumnos arrojaba que cuando buscaban una comprensión profunda de un texto, no basta con la pantalla y se recurre a la impresión. “Los datos científicos recabados indican que la comprensión profunda y el aprendizaje perdurable exige una lectura dedicada y ésta se alcanza muchas veces de mejor modo a través del papel”, añade Giovanni Parodi, director del programa de posgrado de lingüística de la UCV. Parodi hace hincapié en la cantidad de variables que condicionan el proceso de lectura, “muchas de ellas no indagadas científicamente aun, como por ejemplo la motivación, los conocimientos previos, la edad, el nivel de escolarización, la extensión del texto, el tipo de organización lingüística y retórica de la información”.

La variable edad es especialmente relevante si se trata de comparar la generación educada antes de la irrupción de Internet con aquellos nacidos en la segunda mitad de los 90: la llamada generación Google. Es posible que para esa generación la valoración cultural que se le atribuye al texto impreso en nuestra sociedad ya no sea la misma.

El investigador norteamericano David Reinking habla de un mundo post-tipográfico como una forma de etiquetar el impacto de las nuevas tecnologías en la alfabetización o “literacidad”. Reinking plantea que las tecnologías -y particularmente internet- transforman la experiencia de la lectura. En lugar de seguir un texto de principio a fin de manera unidireccional, Internet hace posible crear una ruta propia dependiendo de los intereses y de las opciones de links de la pantalla. Una experiencia distinta que también implica saber evaluar y escoger la ruta de información que puede sobrepasar los miles de páginas con un solo clic.

Frente a esto, Maryanne Wolf, la autora de “Proust y el calamar”, ensaya una respuesta parafraseando a Darwin: “Biológica e intelectualmente, leer le permite a la especie ir ‘más allá de la información dada’ para crear infinitos pensamientos más bellos. Debemos evitar perder esta cualidad esencial en el momento de transición histórica actual hacia nuevas formas de adquirir, procesar y comprender información”.


Artículo publicado originalmente, por la misma autora, en el sitio web  De Libros, Artes y Ciencias

Categorías
Material de Trabajo

La Biblioteca Virtual de Cortázar

«Sólo hay una escapatoria, y consiste en cerrar la puerta de la pieza en que se vive – porque de ese modo uno se sugestiona y llega a ponerse en otra parte del mundo – y buscar un libro, un cuaderno, una estilográfica»

(Julio Cortázar, 1937)


  • Los libros que el autor de ‘Rayuela’ tenía en París se pueden contemplar en la red
  • 50 años de portadas en diferentes lenguas del libro más emblemático del escritor
  • Especial de «Rayuela» una obra querida por todos
Imagen que acompaña la portada de la biblioteca digital de Cortázar
Imagen que acompaña la portada de la biblioteca digital de Cortázar

«Julio Cortázar dijo de Rayuela: «De alguna manera es la experiencia de toda una vida y la tentativa de llevarla a la escritura«. Han transcurrido 50 años desde que el escritor convirtió en palabras la historia que comenzó a soñar en 1958. La novela se publicó por primera vez en Buenos Aires en 1963 y a partir de entonces cambió una parte de la historia de la literatura y agitó la vida de miles de jóvenes en todo el mundo. En la nueva edición de Alfaguara la novela va acompañada de un mapa del París de Rayuela y de un apéndice donde Cortázar cuenta la historia del libro que buscó el más allá de todas las fronteras.

Las historias que escribió y los ejemplares que fue comprando a lo largo de su vida en París se encuentran en la Fundación Juan March. La biblioteca fue donada por su viuda, Aurora Bernárdez, en 1993, con 3.894 títulos (entre libros, revistas y recortes de prensa), que la citada fundación ha incrementado hasta cerca de los 5.000 volúmenes. Fueron libros que en muchas ocasiones el escritor compró en las librerías que se encuentran a orillas del Sena.

En la biblioteca personal de Cortázar se encuentran también muchos de los que debieron ser sus primeros libros: primeras ediciones de textos franceses de autores surrealistas o antiguas ediciones de clásicos castellanos. Muchas obras están dedicadas por sus autores al escritor (Alberti, Neruda, Onetti, Lezama Lima, Octavio Paz…), y otras aparecen firmadas o anotadas por Cortázar. Sus manuscritos literarios y sus papeles están depositados en las universidades de Texas (Austin) y Princeton (Nueva Jersey) y el archivo fotográfico se encuentra en el Centro Galego e Artes da Imaxe de A Coruña. El Instituto Cervantes y la Fundación Juan March han elaborado una visita virtual a Los libros de Cortázar

Fuente: Este artículo fue publicado originalmente en el diario El País

 

Categorías
Columnas y artículos

ERA y la Lectura Digital

Lectura electrónica (infografía de Paulina Padilla)
Infografía de lectura digital, por Paulina Padilla

El año 2009 nos vimos un poco decepcionados al enterarnos de los resultados de la aplicación de  la prueba ERA (Electronic Reading Assessment o Evaluación de la Lectura de Textos Electrónicos) ya que para Chile las noticias no fueron buenas:  fue el país con el penúltimo resultado, obteniendo un puntaje de 435. El promedio internacional entre los 19 países que rindieron la evaluación fue de 499, siendo el puntaje más alto para Corea del Sur con 568 puntos, y el más bajo  para Colombia con 368. Este año nuevamente estaremos atentos a los análisis, ya que en diciembre sabremos  resultados de la versión PISA que se aplicó el año 2012, en la que se incluyó un nuevo aspecto relativo a la  resolución de problemas. De igual modo, el 2015 el panorama volverá a cambiar cuando se integre una nueva variable que medirá las habilidades del trabajo colaborativo. De esa forma, cada vez la prueba PISA suma un nuevo factor buscando no solo actualizar, sino que también emular el entorno cambiante y complejo al que se ven sometidos los estudiantes. Recordemos que esta prueba se aplica cada tres años a los países miembros de la OCDE, y evalúa a estudiantes de 15 años en cuanto a sus capacidades en lectura, ciencias, y matemáticas. Sin embargo, en esta oportunidad me interesa ver en detalle los aspectos relativos a lectura digital. 

¿De qué se trató esta prueba?

Los alumnos tenían que responder  preguntas sobre hipertextos (como sitios web, blogs, etc.)  que  requerían el desplazamiento por la pantalla, incluyendo gráficos, animaciones y enlaces. Para responder correctamente debían emplear sus habilidades de comprensión, pero también las de navegación para localizar la información relevante. Naturalmente la prueba requería ser contestada desde un computador.

Desde el año 2012 hay un proyecto liderado por Fundación Chile respecto a lectura Digital
Los tables, e-readers, smartohones y las aplicaciones son algunas de las herramientas de las cuales leemos en formato digital

¿Cómo se evaluó esta prueba?

La evaluación PISA de la lectura digital consideró una serie de cuestiones importantes que surgen de las diferencias entre el texto impreso y el digital. En primer lugar, cabe plantearse si la lectura digital y la impresa se pueden medir bajo la misma vara. El marco de la lectura de PISA 2009 señala que, si bien muchas de las habilidades que se requieren tanto para la lectura digital como para la impresa son similares, las demandas de la lectura digital exigen que el lector añada a su repertorio nuevas estrategias.

La recopilación de información en Internet requiere una lectura rápida a través de  grandes cantidades de material y la evaluación inmediata de su credibilidad, es decir, requiere un pensamiento crítico.

Todos los textos ERA son hipertextos. Sus características se especifican según distintas categorías, entre ellas el medio (el autor, el mensaje); el formato; también se analizan los instrumentos y características de la navegación que han realizado los alumnos para contestar a las pruebas electrónicas (aspecto del proceso lector que el formato electrónico permite observar mucho mejor que el impreso)

 

La navegación en la evaluación de la lectura:

En los textos electrónicos la navegación es una parte importante del proceso cognitivo de la comprensión lectora digital. El lector tiene que decidir sobre las relaciones entre los textos y la información que se ha de seleccionar, además de decidir qué es lo relevante para la tarea en cuestión. El lector construye su texto a través de la navegación. Este proceso se puede observar indirectamente a través de las rutas que recorren los alumnos en su navegación a lo largo y ancho de los diferentes sitios web, algo que no es posible hacer en el formato impreso.  De acuerdo al informe del Ministerio de Educación de España de la Prueba PISA-ERA 2009, se podría concluir lo siguiente en materia de lectura digital:

Los nativos digitales tienen ventajas en cuanto a la lectura de medios en línea
Los nativos digitales tienen ventajas en cuanto a la lectura de medios en línea
  • «Una buena comprensión lectora de textos electrónicos requiere una navegación efectiva, es decir, elaborar rutas a través de las páginas con información relevante para la tarea que se demanda.
  • Cuando no se requiere navegación, los buenos lectores tienden a no distraerse con páginas irrelevantes.
  • Cuando es necesario comparar información de distintas páginas y la navegación se torna más compleja, los buenos lectores suelen hacer varias visitas a la misma página, e ignoran las páginas irrelevantes.
  • Los mejores lectores saben controlar el tiempo disponible.
  • La exploración mínima de páginas, antes de decidir si la información contenida es o no relevante, suele corresponderse con una lectura ineficaz.
  • Los buenos lectores empiezan la tarea con una ruta de navegación eficaz.
  • Aunque las tareas aquí presentadas tienen muy limitado el campo de navegación, a muchos alumnos les resulta muy difícil seguir una ruta útil y “se pierden” en la información de que disponen. Este resultado implica que, al contrario de lo que muchas veces se asume, muchos “nativos digitales” no
  • saben manejarse con soltura en el entorno digital, y es una necesidad que se debería ayudar a adquirir en el medio escolar.
  • Antes de embarcarse en una ruta concreta, los alumnos deben saber por que están leyendo lo que leen, y qué es lo que están buscando; deben entender que a veces es necesario consultar más de una vez la misma página; necesitan, pues, discriminar y ejercer un pensamiento crítico.
  • La navegación es un aspecto fundamental y específico de la comprensión de textos electrónicos. Una buena comprensión de este tipo precisa elaborar rutas a través de las páginas con información relevante para la tarea que se pide. Antes de decidir si la información contenida es o no relevante, una exploración muy reducida de páginas suele corresponderse con una lectura ineficaz. Por el contrario, los mejores lectores saben controlar el tiempo disponible, empiezan la tarea con una ruta de navegación eficaz y tienden a no distraerse con páginas irrelevantes.
  • Aunque las pruebas del estudio tienen muy limitado el campo de navegación, a muchos alumnos les resulta muy difícil seguir una ruta útil y “se pierden” en la información de que disponen. Este resultado implica que, al contrario de lo que muchas veces se asume, muchos “nativos digitales” no saben manejarse con soltura en el entorno digital, y es una necesidad que debería atenderse también en el medio escolar. Antes de embarcarse en una ruta concreta, los alumnos deben saber por qué están leyendo lo que leen, y qué es lo que están buscando; deben entender que a veces es necesario consultar más de una vez la misma página; necesitan, pues, discriminar y ejercer un pensamiento crítico».

Volviendo a nuestro país, Chile, estuve buscando información de informes respecto a PISA-ERA 2009 y no encontré muchos análisis. La Fundación Chile está realizando un estudio titulado «La educación digital como herramienta de progreso: libros electrónicos. Plan piloto» en el cual se trabaja en las salas de clases con tablets, e-readers y otras herramientas tecnológicas. Quedo a la espera de sus resultados para saber de qué manera influyó en los estudiantes y docentes.


Resolución de problemas se define como: Capacidad que tiene una persona para comprometerse en procesos cognitivos que la llevan a comprender y resolver situaciones problemáticas para las que el método de solución no resulta obvio de modo inmediato.  Incluye la  voluntad de la persona involucrarse con estas situaciones hasta conseguir el desarrollo del propio potencial, como un ciudadano reflexivo y constructivo. Fuente: MINEDUC: PISA Programa Internacional de Evaluación de Estudiantes, 2013.

Habilidades de trabajo colaborativo se define como: Capacidad que tiene una persona para participar de manera efectiva en un proceso por el cual dos o más individuos tratan de resolver un problema, compartiendo el conocimiento, habilidades y el esfuerzo necesarios para llegar a una solución. Fuente: Ibid.

 

Categorías
Columnas y artículos

Lectura en movimiento: E-books en rústico y tapa dura

En un libro de cocina, estas aplicaciones pueden ser muy útiles
En un libro de cocina, estas aplicaciones pueden ser muy útiles

Quienes apuestan por el libro impreso no tienen por qué asustarse, ya que las mejoras multimedia que se aplican a los e-books, gracias  lo cual pasan a llamarse «enhanced books» (lo cual se puede traducir a libros enriquecidos), afectarán a una pequeña cantidad de títulos. Los primeros en añadir estos elementos nuevos a su narración fueron los destinados a un público infantil mientras que las obras de ficción para un público adulto se han vendido con mayor dificultad.

Estas apreciaciones figuran en un artículo publicado en Prospero, uno de los blogs de The Economist especializado en libros, arte y cultura, donde recoge y analiza los libros enriquecidos que han aparecido últimamente.

A las biografías, los libros de cocina, los clásicos y las nuevas formas de ficción interactiva, este tipo de mejoras puede añadirles nuevas capas más ricas y sorprendentes. Entre los ejemplos que proporciona este artículo, destaca la biografía de Muhammad Ali, a la que se le han añadido grabaciones de audio en el que el boxeador rapea sus proezas.

También los clásicos atemporales han demostrado ser buenos candidatos para este tipo de innovación. Así por ejemplo la edición multimedia de T.S. Eliot La tierra baldía recuperó rápidamente el dinero que se había invertido en su creación. El libro cuenta con los manuscritos originales, con notas y adiciones realizadas por el autor, además de vídeos y grabaciones de audio en las que se reproducen ditintos poemas leídos por actores consagrados.

Se aprecia una alta resolución de imágen
Se aprecia una alta resolución de imágen

Las pinturas se pueden llevar en el Ipad del lector
Las pinturas se pueden llevar en el Ipad del lector
Recientemente la librería del museo MOMA lanzó a la venta su colección de » libros enriquecidos» con lecturas monográficas de pintores y sus obras. Estos multi-touch enriquecen la experiencia de aprendizaje haciendo de esta lectura interactiva un placer. Los lectores pueden hacer notas, dejar marcas, escribir con recordatorios de lecturas, hacer búsquedas en todo el contenido. Exactamente lo mismo que en un e-book pero con la diferencia que hay videos y multimedia que potencia el momento de lectura.

Penguin también se ha sumado a “las ediciones ampliadas” con el lanzamiento de un clásico contemporáneo como En el camino, al que se le han añadido fotos de archivo de los manuscritos de Jack Kerouac, junto con instantáneas de sus compañeros de generación, además de entrevistas grabadas en vídeo y mapas en los que se recoge el viaje. También señala este artículo, que muchas de las biografías que aparecen en los márgenes del libro de los personajes que supuestamente inspiraron a Kerouac resultan algo discordantes.

La edición enriquecida de la obra épica de George R.R. Martin Juego de tronos, vincula los nombres de los personajes con un glosario de los clanes además de proporcionar un mapa táctil.

Aún está en estudio el impacto que pueden tener este tipo de libros en las competencias lectoras de los niños
Aún está en estudio el impacto que pueden tener este tipo de libros en las competencias lectoras de los niños

No son exactamente libros, apunta el artículo, sino experiencias interactivas, amplificadas y enriquecidas. Muchos lectores se mantienen escépticos ante esta nueva forma de narración que altera lo que el novelista estadounidense Robert Olen Butler define como “el cine de la mente”. Sin embargo los editores se muestran ansiosos por probar las posibilidades comerciales y creativas que ofrecen los textos enriquecidos.

El editor digital de Random House en el Reino Unido, cree que los mejores proyectos vendrán de la fusión orgánica entre la forma y el contenido: “Se trata de inventar cosas que los lectores no saben aún que les van a encantar”.

Fuente: Lectura Lab. Nueva cadena del Libro

 

Categorías
Columnas y artículos

Leer será tener una copia ilegal en el cerebro

cc: derechoaleer.org
cc: derechoaleer.org

La polémica frase que brinda título a este artículo es de Christopher Kelty, profesor de la Universidad de California, frente al cierre de  la librería virtual «Library.nu». Kelty señala además  que el centro de la discusión debería estar entre la idea de criminalizar el acceso a los libros “ilegales” contrapuesto al asunto de compartir conocimiento.

 

La historia de Library.nu (también conocida como «Gigapedia») y del cierre de su sitio  -el cual albergaba miles de libros en línea en forma gratuita-  fue el broche de oro que marcó la contienda ganada por  la coalición de 17 editoriales que exigieron su clausura.  La misma coalición que ya bajó a  Megaupload y apretó a The Pirate Bay, entre otros. Sin embargo, ante la ausencia de un reemplazo considerable en relación con la oferta que había logrado Library.nu, instituciones y organizaciones que bregan por los derechos de los lectores,  profesores y estudiantes se preguntan si el daño sobre el acceso a la cultura no es mayor que el daño al “derecho de autor”. Es decir, Library.nu era un problema y también una gran solución.

Las diecisiete compañías editoras se unieron desde Estados Unidos, Inglaterra y Alemania para bajar al sitio que tenía una increíble oferta de literatura universal, la cual rondaba los 400 mil ejemplares y algunos dicen que podría haber llegado al millón. Entre las editoriales en contra, están Harper Collins, Oxford University Press y Macmillan.

cc: educationnews.org
cc: educationnews.org

Lo que cuestiona y plantea  Christopher Kelty, quien además de profesor es autor del libro «Two Bits: the cultural significance of the Free Software«, es que el sitio tenía principalmente libros escolares, monografías, análisis biográficos, manuales técnicos, investigaciones en ingeniería, matemática, biología y ciencia, textos con copyright pero fuera de mercado – mal y bien escaneados-  en inglés, francés, español o ruso.  Kelty va más lejos en  su artículo “The Disapearing virtual library” al señalar que esos “bárbaros que pusieron la industria editorial de rodillas no eran otros que estudiantes de cada rincón del planeta deseosos de aprender». Eso es lo que miles de jóvenes y adultos con avidez de aprendizaje hicieron con Library.nu, en apenas unos pocos años “crearon un mundo de lectura y apostaron a compartir contenidos”.

De acuerdo a lo expuesto en su artículo, Kelty señala que los editores piensan que se trató de una gran victoria en la “guerra contra la piratería”, que va a mejorar las ganancias de la industria y les ofrecerá mayor control. Por el contrario, los mal llamados “piratas” piensan que simplemente el contenido se irá hacia otro sitio. Sin embargo, el meollo del asunto  está en comprender que la demanda global por el aprendizaje y la escolarización no está siendo tenida en cuenta por la industria editorial. La gran clase media global está deseosa de  compartir conocimiento. Esta vez, el argumento en contra de Library.nu todavía es más difícil de defender, ya que  no se trata de entretenimiento sonoro o de jóvenes haciendo travesuras y copiando discos para que los bajen sus amigos, sino de un colosal acceso al conocimiento.

La furia por la interrupción al acceso al conocimiento se apoderó de las redes sociales, los blogs, los posts y miles de universidades de todo el mundo que habían encontrado en Library.nu un espacio para terminar con la escasez de acceso al saber, en un mundo en el que la industria editorial sigue pensando que el saber ocupa lugar y hay que pagar por él. O como dice magistralmente Kelty en un tramo de su artículo, “dentro de poco, leer será tener una copia ilegal de un libro en el cerebro”.

 

Artículo escrito por  Mariano Blejman  (@blejma) y extraído de a edición en línea del periódico argentino  página 12

Categorías
Book Dealer Reseñas Literarias

El lectoespectador, porque ya no somos lectores ni espectadores


Portada del libro
Portada del libro

Vicente Luis Mora es crítico literario, ensayista, escritor español y reciente autor de la obra  «El lectoespectador». El texto se ocupa de presentarnos el nuevo entorno en el que se desarrollan la comunicación y la creatividad narrativa, y para ello  contempla medios como Google, Twitter, la televisión o la literatura a medio camino entre el texto y la imagen. El lectoespectador también profundiza en temas literarios ya que, a juicio de Mora: el narrador es hoy quien más atención está prestando a la realidad; el novelista es quien nos está contando ahora los cambios en directo.

De esta forma, El lectoespectador acentúa  la división entre aquellos escritores que permanecen alejados de la red y los que prácticamente viven inmersos en ella. Y eso no hace más que plantearse una serie de dudas que avivan el debate sobre la narrativa y que dan pie a una reflexión subjetiva respecto a la extrema importancia  que se le está dando al medio, por sobre el mensaje. De esa forma comenzamos a olvidar que lo principal es la calidad de los textos, la forma cómo estos se comprender e  interpretan, más que el formato o fondo.

La inmediatez de internet no debe implicar además, como menciona Mora, la desaparición del proceso de selección y edición- algo importantísimo en el resultado final de la obra narrativa- ya que sin edición, depuración y corrección nos abocamos a leer textos en estado bruto. Las posibilidades formales y estructurales que nos proporcionan las nuevas tecnologías son muy interesantes e inspiradoras de nuevos ámbitos en los que desarrollar esos textos. Pero el hecho de usar esas tecnologías no implica que el texto “ascienda” a una división superior.

Obviamente el libro está disponible en versión Kindle
Obviamente el libro está disponible en versión para Kindle

Tampoco usar unos mismos medios para difundir  opiniones y textos, y también -por qué no- para publicitarlos, permite que se compartan  intereses narrativos. Por eso, lo  que desarrolla Vicente Luis Mora en El Lectoespectador es una visión de futuro prometedora e interesante. Nos anima a seguir las múltiples vías y posibilidades que nos ofrecen los medios digitales y la necesidad que tenemos todos de explorarlas intensa y extensamente, descubriendo en esa búsqueda las probables nuevas formas de la narrativa futura.

En definitiva, la obra pretende generar diálogo y tiene el valor de enmarcar un debate, al que tarde o temprano todo aquel que se dedica a la literatura acaba enfrentando y que hace referencia a cómo estar a la altura de nuestro tiempo, exponiendo al lector a una nueva cosmovisión que contrasta con una obsoleta mirada al presente teconológico. Bajo esta premisa el autor despliega en 17 capítulos (contando prefacios, apéndices…) una determinada visión del mundo, de la literatura y de la crítica en la que la tecnología que nos conforma como hombres hoy tienen un papel importante. Grosso modo la filosofía se puede dividir en tres grandes grupos: la metafísica (que da cuenta de cómo es el mundo); la epistemología (que da cuenta de  cómo conocemos el mundo) y la lógica (que da cuenta de qué razonamientos son válidos). De forma similar, Mora expone cómo es el mundo hoy: Pangea; cómo se conoce este mundo hoy: a través de la imagen, y en el caso de la lectura a través del lectoespecatador, y expone algunos silogismos en la era de internet. Así, y aunque no están citados directamente en libro, se pueden leer en la cuenta de twitter del autor algunas de sus consideraciones sobre las redes sociales

 

Vicente Luis Mora
Vicente Luis Mora

En palabras del autor «De un tiempo a esta parte me he dado cuenta de que me siento algo saturado. Creo que mi falta de respuesta a algunos libros que en otras circunstancias hubieran sido reseñados (El rey pálido, Libertad, etc.) se debe a que siento cierto cansancio en lo tocante a lecturas «obligadas». Durante unos meses voy a dejar la crítica literaria de actualidad, centrándome en lecturas realizadas por puro gusto, sin necesidad de opinar sobre ellas. Haré algunas recomendaciones puntuales, sin honduras analíticas, y aún tengo que subir la lectura de una reciente edición de Gargantúa y Pantagruel, pendiente de publicación en otro lugar. Cuando vuelva, lo haré con las pilas cargadas y con voluntad de seguir compartiendo lecturas, como hasta ahora. Hasta entonces, El lectoespectador es mi aportación crítica a la conversación. Ojalá os guste.»

Si quieres más detalles se la obra,  puedes revisar el  índice desde el blog del autor.

Mora, Vicente Luis El Lectoespectador. Barcelona: Seix Barral, 2012. 288 p.

ISBN: 9788432214080

Fuentes: El lamento de Portnoy y Entrefragmentos

Categorías
Columnas y artículos

El libro se revitaliza: ¡Larga vida al libro!

Ipad, Kindle o el libro cómplice en el velador: todo vale a la hora de leer.

A ninguno debería sorprenderle que “El Código Da Vinci” o “Harry Potter” sean libros que podrían destronar, desde el podio de uno de los más leídos, al célebre “Quijote de la Mancha”. Pero en esta suerte de ranking de escritores hay claras diferencias…. no en vano el día que Cervantes falleció fue escogido para celebrar el Día Internacional del Libro y del Derecho de Autor. Mucho después la UNESCO registró esta fecha en las efemérides internacionales, y todavía mucho después algunos de nosotros tiene en su wish list un Ipad, unKindle u otro de los dispositivos que prometen poner a nuestros pies la biblioteca de clásicos, best sellers, textos de trabajo y un sinfín de otros libros de nuestro interés.

No me extrañaría que muchos de los que arguyen que el romanticismo del libro impreso es irremplazable, podrían terminar cediendo ante la tentación de tener su biblioteca en el bolsillo. ¿Qué mejor que evitar andar transportando y cargando peso? ¿Qué mejor que evitar “achurrascar” las páginas de nuestros planos y rectangulares amigos?

Parece que este despliegue tecnológico nos confronta con un hecho: No importa que tan cibernéticas hojas-byte vista el libro hoy. Lo que importa es el contenido, el mensaje, y la forma en que lo comprendemos y comunicamos. Y es que el libro versión impresa, el incondicional que nos acompaña sin importar la rudeza de la mochila o de la cartera de turno, es el mismo que nos permite estar conectados. Curioso, ¿no?. “Estar conectados” es un concepto que relacionamos con la red digital, la web 2.0. Pero, para que esa conexión se logre, debemos procesar, comprender e interpretar lo que leemos…desde los 140 caracteres de los twitters que recibimos a diario, hasta la novela que disfrutamos en el metro camino a casa.

Hoy en día  los chilenos estamos más cerca de nuestra versión criolla de los supersónicos: Ipad y Kindle son una realidad a la vuelta de la multitienda más cercana. Nosotros cambiamos, y el libro cambia con nosotros. Parece que a Negroponte no le quedará más que conformarse, porque a principios de los ’90 este señor profetizó la muerte del libro. ¿Desorientado? ¿Influenciado por aires ambientalistas?. No lo sabemos, pero evidentemente no le pidió la opinión a los aficionados a la versión impresa. Esos…los mismos que leen desde el clásico de tapas duras y empaste inglés –disfrutando su “olor a libro viejo”- hasta el pocket con las sempiternas hojas arrugadas y manoseadas.

Sin duda estamos adaptándonos a nuevas e ingeniosas maneras de consumir contenido, de leer, de informarnos y de cultivarnos. Pero existe algo que permanece constante: la fascinación que ejerce una historia bien contada, el deseo de aprender acerca de nosotros mismos y del mundo, el placer culpable por identificarnos con un personaje. Impreso o electrónico, lo importante es que leamos y consideremos la lectura como una oportunidad para crecer y encantarnos.

Y, si acaso a algunos de ustedes tiene alguna duda respecto a mis preferencias, les aclaro de inmediato que no me interesa mucho el formato. Privilegio, por sobre todo, que el contenido me acompañe. Si tengo ganas de gozar el placer estético de la lectura, querré que mis dedos saboreen la suavidad de las hojas, si tengo que buscar referencia optaré por hacer zapping, y me refugiaré en la versión digital… puedo cambiar de uno a otro sin reparos ni remordimientos.

Y que el señor Cervantes y Saavedra me perdone…

Categorías
Eventos y actividades

La lectura en internet no significa sólo un cambio de soporte

La lectura en Internet supone cambios en el modo de acceder, procesar, usar y transmitir la información para satisfacer objetivos muy diversos: relacionarse con los otros, participar en actividades sociales, aprender, etc. La lectura digital va unida a nuevas prácticas culturales, que requieren nuevas competencias. Es por eso que desde diversos ángulos e idiomas los actores sociales se están reuniendo para abordar todas las aristas de este tema, que no es sólo educativo, sino que también es cultural y social.

Pero no es sólo para debatir y concluir que se están reuniendo, sino que también para llegar a propuestas concretas que conciernen a mercados e industrias específicas,  emprendiendo acciones en torno a ello. Un claro ejemplo es un evento ocurrido hace menos de un año en la  Biblioteca Nacional de Españal , en Madrid. Esta reunión fue el II Congreso Nacional  de Leer.es, titulada  “Leer para aprender. Nuevas alfabetizaciones”  y se centró en   la lectura digital y los cambios que ésta presupone en el medio educativo, cultural y bibliotecario.

Más específicamente, en el caso español,  se quiso reflexionar sobre las nuevas alfabetizaciones en la que el acceso a las fuentes de información es fundamentalmente Internet y en la que la comunicación se produce a través de nuevos medios  y nuevas normas sociales. . La reflexión se centró especialmente en la lectura como  el instrumento  más importante  para el aprendizaje en el conjunto de las áreas y materias del currículo.

El Congreso tuvo los siguientes ejes centrales para compartir y debatir.

  • La lectura híbrida, un encuentro con el arte, el cine y la literatura. Consiste en abordar la comprensión lectora de textos artísticos a partir de los principios de la estética para favorecer el desarrollo de la competencia comunicativa lingüística, así como la competencia artística y cultural. En este contexto, la lectura es concebida como una interacción, un diálogo entre el texto multialfabético (verbal, no verbal, audiovisual, icónico, musical, etc.) y el lector.
  • Discurso multimodal: lectores críticos y creativos, relacionado con los rasgos del nuevo contexto sociocultural y tecnológico dónde aprenden los jóvenes. Las características de este aprendizaje que, muy a menudo, se produce en contextos informales se engloban en el concepto del llamado «Entorno Personal de Aprendizaje«
  • Centro Virtual Cervantes: recursos para educar en diversos contextos. Se hizo una descripción de los materiales tanto digitalizados como digitales que estrán recogidos en este portal destacando los materiales para trabajar con los textos publicitarios que Leer. es ha realizado en colaboración con el CVC: Diálogos y Leer publicidad en el MUVAP.
  • Biblioteca escolar y nuevas alfabetizacionesEn un entorno de la información y el conocimiento marcado por cambios constantes  que permiten acceder cada vez con mayores facilidades a un mayor volumen de datos, textos e imágenes, surgen nuevos retos para las bibliotecas escolares que, lejos de hacerlas prescindibles, pueden consolidarlas definitivamente en nuestro sistema educativo.
  • La competencia digital en el trabajo por tareas.Esta ponencia abordó la importancia del trabajo por tareas partiendo de contextos de aprendizaje cercanos al alumnado en los que se potencie el análisis, la interpretación, la relación, los valores que permiten integrar lo comunicativo y lo real, lo que supone pensar en los alumnos como agentes sociales implicados.
  • Educación Literaria y TIC. Se aclaró el concepto de educación literaria frente al de enseñanza de la Literatura. La educación literaria supone una experiencia, individual y social, de la literatura y unos contenidos de aprendizaje sobre los temas y la forma de los textos literarios  trabajados con una metodología activa. El uso de las TIC en  el trabajo con los textos literarios multiplica las posibilidades de hablar y escribir sobre literatura así como de crear  y  recrear  textos literarios.

La conferencia de clausura se tituló  La necesidad de la ficción y fue pronunciada por José María Merino (escritor y miembro de la RAE) este acto de clausura, además, se acompañó  de las  conclusiones del Congreso,  entre las que destacan:

  • «Los objetivos de la alfabetización se han ampliado para incluir las competencias relacionadas con la recepción y la producción de un discurso multimodal, que incluye el lenguaje verbal, los lenguajes audiovisuales y el uso de dispositivos digitales para la composición y la recepción de mensajes. Este conjunto de competencias constituye la alfabetización mediática.
  • La Web 2.0 o Web social no es solamente una biblioteca que permite acceder a una ingente cantidad de información. También proporciona espacios y recursos para producir, publicar y compartir contenidos. Es un entorno para la “escritura multimedia” y para la construcción compartida de conocimientos
  • Las nuevas alfabetizaciones –saber leer y escribir en la Red- requieren insistir en los cambios metodológicos que se vienen reclamando para el desarrollo de las habilidades lingüístico-comunicativas: saber leer y escribir en general, y en los nuevos formatos y contextos, requiere unas habilidades y estrategias que sólo se pueden desarrollar si se incorpora la lectura y la escritura como principal instrumento de aprendizaje en todas las áreas.
  • Los cambios metodológicos necesarios para las nuevas alfabetizaciones enlazan con las propuestas de innovación educativa que ya tienen una tradición en el ámbito escolar: trabajo por proyectos, por tareas, enseñanza globalizada, talleres literarios, etc.
  • Las bibliotecas escolares, como centros de recursos y servicios de apoyo al aprendizaje, constituyen un entorno privilegiado para el desarrollo de todas aquellas competencias relacionadas con  la lectura y el tratamiento de la información. En un contexto digital, la biblioteca amplia sus objetivos y funciones y se involucra claramente en el proceso educativo, facilitando las nuevas alfabetizaciones y reforzando las más tradicionales.»

Para quienes quieran leer todas las conclusiones, pueden descargarlas aquí. También puede revisar el temario del congreso y un video con el resumen de las ponencias.

Y, finalmente si alguno quiere refrescar el concepto de las nuevas competencias digitales o “New media Literacies”le recomiendo leer  a Henry Jenkins (investigador y y director del Programa de Estudios Comparativos sobre los medios de comunicación del MIT) en Confronting the Challenges of Participatory Culture: Media Education for the 21st Century cuyos principios básicos quedan resumidos en el siguiente didáctitco y entretenido video (traducido al español)

Fuentes: Leer.es, Blog de leer.es

 

Categorías
Columnas y artículos

La prueba PISA mide habilidades de lectura digital

En  la sociedad de la información y la comunicación, la Prueba  Pisa de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE, foro de los países más ricos del mundo) desde su última versión mide por primera vez las capacidades de los alumnos para manejarse en la era digital a través de una prueba de lectura en formato electrónico.

Se trata de medir los recursos necesarios para “acceder, manejar, integrar y evaluar información; construir nuevos conocimientos a partir de textos electrónicos”, algo “bastante distinto a hacerlo con textos impresos”, explica el director del Informe Pisa, Andreas Schleicher. Así, el objetivo de esta prueba trasciende la mera capacidad lectora, tal y como comúnmente se entiende, aunque “no es tanto sobre tecnologías, sino más bien sobre las competencias cognitivas que hacen falta para el uso efectivo de la tecnología”, añade Schleicher.

La prueba, llamada ERA (Electronic Reading Assessment)  no consiste simplemente en leer unos textos que aparecen en la pantalla de un ordenador, sino que los alumnos tendrán que buscar información en una aplicación electrónica que simula Internet y que ayuda a responder a las preguntas. Igual que el que navega por la Red, de una información a otra interconectada, el alumno tendrá, por ejemplo, que navegar hasta un texto, leerlo, sacar la información necesaria para contestar y responder a través de la pantalla.

Además, la prueba intentará evaluar si los jóvenes son capaces de “juzgar la relevancia y la corrección de una información (algo necesario para utilizar cosas como Google o Wikipedia), a diferencia del uso de una enciclopedia, donde la información ya está ordenada y se asume que es correcta”, añade Schleicher. “Por supuesto, todas esas habilidades de alguna manera estarán correlacionadas con las de la lectura tradicional, pero mucho menos de lo que a menudo se asume”, continúa el director de Pisa. De hecho, los resultados de la prueba de lectura electrónica se ofrecerán de forma independiente de los de lectura impresa.

En 2009 sólo una muestra de alumnos harán el test digital. Tendrán 40 minutos para completar 27 preguntas, a diferencia de las dos horas que tienen para completar las pruebas sobre papel de matemáticas, ciencias y lectura. Cada año la prueba tiene más preguntas sobre una de ellas y esta vez será la lectura.

Fuente texto:  Diario El País

 

 

Categorías
Sin Categorizar

¿Qué estás leyendo? Red social para lectores

¿Qué estás leyendo?:

Bukear.com es un lugar de encuentro virtual donde el principal «gancho» es compartir las reseñas sobre libros que cada usuario «postea».

Las redes sociales especializadas se han masificado y es posible encontrar las más singulares del mundo: para los más bellos, para científicos, para deportistas y, ahora incluso, se suman las creadas «para buenos lectores de habla hispana». Esto, porque, desde diciembre de 2009, dos argentinos crearon la red Bukear ( www.bukear.com ) con el firme propósito de promocionar la lectura entre quienes se suscriben al sitio.

Y no les ha ido mal. Ya cuentan con más de 2.500 usuarios, principalmente de Argentina, México, Chile, Perú, España, Venezuela y Estados Unidos. Se registran en promedio entre 15 y 20 personas diarias. Según cuenta a «El Mercurio» Mariano González, creador del sitio junto a Pablo Bicego, Bukear es una herramienta para formalizar una costumbre que tenemos todos cuando leemos, vemos una película o una obra de teatro: comentar lo que nos gusta y compartirlo con nuestros amigos.

«Esta red social es simplemente eso, volcar en la web una charla entre amigos. Desde que comencé a leer, siempre tuve la idea fija de conocer qué leían mis amigos, entonces Bukear calza perfecto en esa intriga que me persigue siempre: ‘¿Qué estás leyendo?’ «, comenta Mariano desde Mendoza.

Por lo tanto, complementa, Bukear puede ser una buena guía de lectura para quienes no saben qué leer. «Nos ha pasado con algunas reseñas que han sido tan conmovedoras, que hemos terminado en una librería comprando esos libros recomendados», asegura.

Éxito creciente

Hay actualmente más de 1.300 reseñas de libros y, al igual que el resto de las redes sociales que existen para lectores en el mundo en inglés (Shelfari, Goodreads o aNobii), para ingresar a esta selecta lista basta con suscribirse gratuitamente en el sitio. Luego es posible acceder a la Buketeca, es decir, una larga lista de libros con reseñas.

La red social permite asociar un puntaje a estos comentarios; por lo tanto, se generan automáticamente rankings de los más comentados, los más leídos, etc.

A pesar de que los creadores de esta red social no han impuesto reglas para publicar los comentarios, Mariano señala que los usuarios cuidan mucho la forma en que escriben sus reseñas. Recuerda uno que les llamó mucho la atención que decía: «Gracias Bukear por quitarle el almidón a la literatura». «Creo que ése era el concepto que buscábamos, acercar la literatura a la gente común, a quienes no son profesionales de las letras, que son, en definitiva, quienes compran los libros», comenta.